29.07.24 Roberto Buscapé

 

Desde su apertura en 1972, el Restaurante Sacha ha resistido el paso del tiempo, consolidándose como un referente en la escena gastronómica de Madrid. Este bistró botillería, bajo la dirección de Sacha Hormaechea, sigue ofreciendo una cocina de raíz gallega y vasca, con elaboraciones sencillas y tradicionales que destacan por la excelencia en la calidad de sus productos y su distintiva preparación. En Sacha, cada plato es una reivindicación de la cocina española, fusionando un punto de modernidad con la autenticidad de sus orígenes.

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Una visita a Sacha es una experiencia única. Su terraza, un refugio verde y tranquilo, es ideal para disfrutar de una comida al aire libre en los días cálidos de verano. El servicio, excepcional y eficiente, refleja el espíritu de la vieja escuela, donde cada detalle está cuidado al máximo para garantizar una experiencia culinaria sin igual.

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En nuestra última visita probamos las cigalas, el salpicón de bogavante, la falsa lasaña de txangurro y el steak tartar, cada uno elaborado con productos de altísima calidad y tratado con la delicadeza que caracteriza a este restaurante. La cocina de Sacha es una combinación de naturalidad, frescura y un toque gamberro, que sorprende y deleita a sus comensales en cada visita.