Los mejores dulces de España para Navidad
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20.11.23 Julián Acebes
En la atmósfera festiva que inunda la Navidad, la riqueza de la tradición gastronómica española se despliega a través de sus dulces más emblemáticos. Sumérgete en el delicioso universo de la repostería española con nuestra selección de dulces que han encandilado paladares durante años.
Desde joyas centenarias que evocan la grandeza del Siglo de Oro hasta creaciones artesanales que fusionan la innovación con la autenticidad, estos dulces son mucho más que postres; son testigos de una historia rica y apetitosa que ha resistido el paso del tiempo. De la mano de renombrados pasteleros y confiteros, descubre la esencia de la Navidad en cada bocado.
En este recorrido por los dulces imprescindibles para esta temporada, exploraremos las historias detrás de estas delicias, sus ingredientes cuidadosamente seleccionados y el arte artesanal que las hace únicas. Prepárate para sumergirte en un viaje culinario que despierta la nostalgia, celebra la tradición y ofrece una experiencia gastronómica inigualable. ¡Deja que los sabores de los mejores dulces de España para Navidad conquisten tu paladar!
Turrones Beamut
Las festividades navideñas no podrían estar completas sin el dulce encanto de los turrones, y entre las exquisiteces que marcan la pauta en esta temporada, los turrones artesanos de Turrones Beamut se alzan como auténticas joyas gastronómicas. Esta pequeña empresa familiar turronera, con su sede en Jijona y almacén en Orihuela, se ha ganado el corazón de sus clientes gracias a su excelencia en calidad y un trato amable que resalta por encima de todo.
Con una tradición arraigada desde 1903, Turrones Beamut es una firma que celebra la autenticidad en cada bocado. Juan Beamut Oliva, el patriarca turronero y maestro, ha legado el arte de esta delicia obtenida a partir de la cocción de miel, azúcares, claras de huevo y selectas almendras marconas (Alicante y Jijona), junto con la elaboración de mazapanes, chocolates y una gama variada de dulces navideños.
Una de las particularidades que definen a Turrones Beamut es su presencia en diversos mercadillos, donde no solo se pueden adquirir estos deliciosos turrones, sino donde se vive la experiencia de una atención esmerada y un servicio excepcional, enmarcando la compra de estos dulces en un momento especial y acogedor.
La gama de turrones presentada por Beamut resalta por su diversidad y calidad. Desde el clásico Turrón de Alicante, que exige un mínimo del 69% de peso en almendras Marcona, hasta el suave y tradicional Turrón de Jijona, preparado con una mezcla de almendras marconas, clara de huevo y miel, cada uno de sus productos es un reflejo del cuidado artesanal que caracteriza a esta marca.
Además de estos, Turrones Beamut también deleita con variedades como el Turrón de Guirlache, una fusión de azúcar, almendras, miel y sésamo; y el Turrón a la Piedra, con un proceso en frío y refinamiento con un molino de piedra, acompañado de almendras tostadas, ralladura de limón natural, azúcar y canela.
La empresa no solo es un nombre, sino una experiencia de sabor arraigada en la tradición, la dedicación y el compromiso con la calidad. La posibilidad de adquirir estos tesoros navideños a través de su tienda online, con envíos gratuitos para pedidos superiores a 50 euros, abre las puertas para disfrutar de estas delicias desde cualquier rincón de la Península. Con Turrones Beamut, cada bocado es un viaje al sabor y a la autenticidad de la Navidad en forma de exquisitos turrones artesanales.
Pastelerías Tolosana
Las festividades navideñas se aproximan y con ellas, el placer de disfrutar de delicias dulces que endulzan el espíritu de la temporada. Entre las exquisiteces que marcan la pauta de esta época especial, destaca la Trenza de Almudévar® de Pastelerías Tolosana, un tesoro de la repostería española que deleita los paladares desde hace más de tres décadas.
Con más de 60 años de experiencia en la elaboración de pasteles y panes, Pastelerías Tolosana se ha convertido en un referente de la pasteleria aragonesa y nacional. Esta reconocida empresa, creadores de la Trenza de Almudévar, su joya gastronómica por excelencia se distingue, además por la calidad de sus panes y exquisitos pasteles.
¿Qué hace a la Trenza de Almudévar tan especial? Se trata de una creación única, nacida en Almudévar, Huesca, y aclamada más allá de las fronteras españolas. Reconocida con la Marca C’alial, de Calidad Garantizada por el Gobierno de Aragón desde 1994, esta delicia es una especialidad de bollería hojaldrada con mantequilla, combinación perfecta de texturas y sabores que conquistan hasta los paladares más exigentes.
El proceso de elaboración es una obra maestra artesanal: una masa de hojaldre cuidadosamente fermentada durante 72 horas, una capa de glasa que realza su crocante exterior, y un relleno cremoso con almendras, nueces y pasas que aportan textura que invita al deleite en cada bocado.
La Trenza de Almudévar® es un símbolo de dedicación y calidad, gracias a la utilización de ingredientes de primera calidad y técnicas de pastelería artesanales. El compromiso con la excelencia es evidente en cada etapa del proceso, desde el uso de masa madre hasta la meticulosa fermentación que realza sus sabores.
La firma no solo se adentra en la tradición, sino que también abraza la innovación. Gracias a la era digital, ahora es posible adquirir esta joya repostera con un simple clic. Disfrutar de la Trenza de Almudévar® es posible en cualquier momento y lugar, brindando alegría tanto a los más pequeños como a los adultos.
Los expertos artesanos de Pastelerías Tolosana transmiten su pasión por la panadería y la repostería a cada pieza, lo que convierte a la Trenza de Almudévar® en un "must" en estas festividades. Este delicioso manjar, que requiere paciencia, técnica y experiencia, se alza como una joya inigualable que merece ser disfrutada en estas fiestas navideñas y en cualquier ocasión especial. ¡No te prives de la oportunidad de probar esta maravilla gastronómica!
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Confituras Goya
En la búsqueda de los dulces más exquisitos para la temporada navideña, Confituras Goya se erige como un referente en la artesanía confitera y bombonera. Fundada en 1886 por Manuel Goya en Vitoria-Gasteiz, esta empresa familiar ha forjado su reputación a lo largo de cinco generaciones, ofreciendo una amplia gama de productos que deleitan los paladares más exigentes.
La historia de Confituras Goya se entrelaza con la evolución de la confitería y la creatividad en la elaboración de dulces. Fue bajo la dirección de José Goya Mendizábal en la década de 1920 cuando se crearon los emblemáticos bombones "Vasquitos y Nesquitas", que en sus inicios eran solo dos variedades y que, con el tiempo, se expandieron a una colección de exquisiteces que incluyen Bocaditos, Kirris, Goyescos, Frutas Vascas y las deliciosas Trufas. Además, fue esta generación la que ideó la reconocida caja en la que se presentan estos exquisitos bombones.
El legado de Confituras Goya se ha ido fortaleciendo a lo largo de los años, con José Manuel Goya García expandiendo el negocio y consolidando su presencia con la apertura de nuevas tiendas en Vitoria-Gasteiz, así como la modernización de sus procesos al trasladar el obrador a la calle Barrachi 35 en 1997. Estas nuevas instalaciones permitieron ampliar la gama de productos y afianzar su compromiso con la calidad, manteniendo la filosofía artesanal en todos sus productos.
Las delicias que ofrecen van desde las tentadoras Trufas artesanales, con sabores de nata, café, ron, whisky y otros licores, hasta el surtido de bombones como los Vasquitos y Nesquitas que incluyen los Goyescos, Kirris, Bocaditos, Frutas Vascas y la exquisita trufa de café, nata y una variedad de licores. La amplia selección y la exquisita combinación de sabores convierten a estos dulces en imprescindibles para celebrar la Navidad.
Para quienes buscan presentes únicos, Confituras Goya ofrece cestas de Navidad con una variedad de sus dulces, así como una excelente selección de turrones, incluyendo el turrón de trufa de naranja, el de yema tostado y el delicioso turrón de Vasco Almendra (con cobertura de chocolate negra y praliné con frutos secos).
La posibilidad de adquirir estas delicias no se limita solo a la tienda online, sino que se extiende a sus establecimientos en Vitoria-Gasteiz, Pamplona, Logroño, Bilbao y en Madrid en El Club del Gourmet de El Corte Inglés, llevando la tradición y el sabor de Confituras Goya a toda la región. Estos exquisitos dulces representan la perfecta fusión entre tradición, calidad y la celebración de la temporada festiva.
Raúl Asencio Pastelerías
En el corazón de Aspe, Alicante, la tradición pastelera de la familia Asencio se despliega a lo largo de los siglos, remontándose hasta 1758. Raúl Asencio Pastelerías, heredera de esta rica historia, presenta un deleite único para la temporada navideña: el panettone artesanal.
La saga comenzó con Vicente Asencio y Margarita Almodóvar, quienes dieron inicio a una tradición pastelera que ha pasado de generación en generación hasta llegar a Raúl Asencio y Teresa Navarro, los maestros detrás del panettone que hoy recomendamos. La devoción por la pastelería y la calidad de los ingredientes se ha mantenido constante, llevando a Raúl Asencio Pastelerías a la cima de la excelencia en la elaboración artesanal.
Cada elaboración, incluido el panettone, se crea meticulosamente de manera artesanal, utilizando ingredientes naturales de la más alta calidad y provenientes de la región. Cada amasado refleja el mimo y la dedicación que caracterizan a esta pastelería, garantizando siempre la máxima calidad en sus productos.
El panettone, un dulce que siempre fascina, ha sido perfeccionado por Raúl Asencio Pastelerías a lo largo de más de una década. La elaboración artesanal incluye el uso de masa madre natural de larga fermentación, lo que confiere a este dulce una duración excepcional de hasta un mes. Con ocho variedades, desde el clásico milanés hasta el Adriano con un corazón de crema de chocolate y avellana, la variedad es tan amplia como deliciosa. Entre sus opciones, también se encuentran mini panettones artesanales de chocolate y naranja, una deliciosa adición a la temporada navideña.
La dedicación inquebrantable a la calidad ha llevado a Raúl Asencio Pastelerías a recibir la Medalla de Bronce en el certamen Miglior Panettone del Mondo de la FIPCG de Roma durante tres años consecutivos.
Con Raúl Asencio Pastelerías, el panettone artesanal se convierte en una experiencia única y exquisita para compartir en estas fiestas.
Mantecados Felipe II
Finalizamos con los Mantecados Felipe II, que destacan como una joya única y centenaria, encarnando el espíritu festivo de la temporada navideña. No se trata solo de un simple dulce, sino de una historia que se remonta a tiempos antiguos, posiblemente durante la Reconquista antes del descubrimiento de las Américas en 1492.
El mantecado Felipe II lleva consigo el nombre de uno de los monarcas más ilustres de España, y la historia sugiere que este delicioso manjar fue ofrecido por el Conde de Benavente a Felipe II y su esposa Isabel de Valois en una ocasión señalada durante el Siglo de Oro español.
Este distintivo dulce, compuesto por harina de trigo, azúcar glas, manteca de cerdo y harina de almendra marcona, se ha mantenido fiel a su receta original. Presentado inicialmente en bloques más grandes, el paso del tiempo lo redujo de tamaño, envolviéndolo delicadamente en papel de seda.
En 1903, en la Exposición Internacional de Madrid, el mantecado Felipe II fue galardonado con la "Medalla de Oro" y un Diploma de Honor de 1ª clase, convirtiéndose en el único mantecado español en recibir tal distinción.
Registrado® como el primer y más antiguo mantecado de España en la oficina de patentes y marcas del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el mantecado Felipe II es considerado la "apoteosis de la confitería" por el miembro de la Real Academia de la Lengua Española, José María Peman, en su libro "Felipe II en El Escorial".
La Confitería Blancanieves Tejedor, el obrador familiar artesano de los Mantecados Felipe II, ha recibido numerosos reconocimientos en distintos países, consolidando la reputación de estos dulces como un privilegio y una leyenda a nivel mundial.
Elaborados a mano con los mejores ingredientes, los mantecados Felipe II mantienen viva la tradición artesanal que ha perdurado a lo largo de los siglos, haciendo de ellos un dulce exquisito y selecto que sigue siendo apreciado y deseado en todo el mundo. Estas delicias son el regalo perfecto para celebrar la Navidad con un toque de historia y sabor inigualable.