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Gastro agenda semanal en Madrid 2025. Semana 24
- Julián Acebes
- hace 2 días
- 3 Min. de lectura
Queremos que descubráis cinco planes gastronómicos que celebran el sabor de lo auténtico, lo artesanal y lo inesperado. Llega la edición de nuestra gastro agenda semanal para la semana 24 del 2025 con propuestas que combinan tradición castiza, influencias internacionales y el espíritu veraniego que ya se empieza a respirar en la capital.
Entre los planes más destacados, podréis celebrar el Día Internacional de la Tapa con un homenaje al bocado más nuestro, dejaros sorprender por la cocina de un chef que aterriza desde el otro lado del Atlántico, disfrutar de una terraza pensada para saborear el verano, probar un sándwich de edición limitada que ya está dando que hablar, y redescubrir un dulce de toda la vida reinterpretado con mimo y creatividad.
Desde GastroMadrid os animamos a salir, brindar, probar y disfrutar cada uno de estos planes. ¡No te los pierdas!
Desencaja Club de Campo da la bienvenida al verano con su terraza más apetecible
Con la llegada del buen tiempo, Desencaja Club de Campo abre su terraza y recupera uno de los rincones más especiales del verano madrileño. A solo unos minutos del centro, este refugio natural dirigido por el chef Iván Sáez ofrece una cocina honesta y sabrosa, con producto de temporada y elaboraciones artesanales. Desde croquetas de jamón hasta arroces para compartir, todo se disfruta en un entorno único bajo encinas centenarias. Una carta de vinos sorprendente y un ambiente relajado completan este plan perfecto para comer, cenar o alargar la sobremesa sin prisa ni reloj.
El chef mendocino Lucas Bustos desembarca en Madrid con Gurisa
El chef mendocino Lucas Bustos desembarca en Madrid con Gurisa, su nuevo restaurante en la calle Zurbano, donde el fuego es el alma de una propuesta que conecta con la cocina de raíz. Tras conquistar Uruguay, Bustos apuesta por una carta con platos como la milanesa de ojo de bife, chipirones a la brasa o alfajor de quinoa con gambas crudas. El espacio, elegante y acogedor, incluye cocina vista y mesa del chef. Vinos argentinos, uruguayos y europeos completan una experiencia honesta y vibrante que ya suena entre los planes imprescindibles de la temporada. Atención al menú degustación.
Bareto celebra el Día Internacional de la Tapa reivindicando algo muy nuestro, bocao a bocao
El Día Internacional de la Tapa se vive mejor donde las tapas mandan. Por eso, Bareto lo celebra sacando pecho de lo suyo: bravas con alioli, flamenquines de cecina, oreja crujiente o montados de calamares que saben a barra de toda la vida. En sus nueve locales repartidos por Madrid, el ambiente es castizo, la cocina directa y el vermú se sirve con una sonrisa. No hay trampas ni fuegos artificiales, solo recetas que se han ganado el sitio a bocao limpio. Esta semana, toca brindar por la tapa. Y en Bareto, se hace como Dios manda.
De Tennessee a Terzio, el sándwich de costilla más deseado estará disponible sólo durante un mes
Terzio vuelve a hacerlo. El restaurante de Saúl Sanz presenta un fuera de carta que lo tiene todo para convertirse en adicción: costilla de cerdo tierna, pan brioche y una salsa barbacoa casera con toque de café que deja huella. Lo completan jalapeños bien medidos y ese estilo desenfadado pero preciso que define al local. Sólo estará disponible durante un mes, así que conviene no pensárselo mucho. En Terzio, los nuevos platos no sustituyen, suman. Porque aquí la cocina cambia, evoluciona y sorprende, pero siempre con sabor de fondo. Como este sándwich. Que no avisa, pero enamora.
Madrid da la bienvenida al sabor de la tradición en forma de rosquilla con Bercianitas
Tradición y memoria se hornean cada día en Bercianitas, la nueva propuesta artesanal que aterriza en Madrid con sabor a pueblo. Estas rosquillas, inspiradas en una receta centenaria de Méntrida, llegan al Mercado de Guzmán el Bueno para conquistar corazones (y sobremesas) con ingredientes 100% naturales y mucha alma. Jorge, Álvaro y Marcos —amigos de toda la vida— han rescatado este dulce familiar como homenaje a las abuelas y a esas mesas llenas de historias. Un bocado tierno, esponjoso y emotivo, que reivindica el placer de compartir. Porque hay sabores que no deberían perderse. Y este, menos aún.
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