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Gastro agenda semanal en Madrid 2025. Semana 27
- Roberto Buscapé
- 2 jul
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 9 jul
Arrancamos una nueva semana con cinco planazos que no te puedes perder si quieres disfrutar de lo mejor de la gastronomía madrileña en pleno verano. En esta gastro agenda semanal de la semana 27 te proponemos opciones para todos los gustos: desde terrazas ideales para escapar del calor hasta menús que reinterpretan la cocina tradicional con un toque innovador.
Esta semana descubrirás un menú estival con mucha personalidad, un brunch con esencia castiza en un entorno natural único, espacios con historia que siguen sorprendiendo, y rincones donde la cocina del norte conquista a golpe de sabor. Además, te damos una pista perfecta para refugiarte del calor madrileño entre tapas, bebidas frescas y ambiente relajado.
Así que ve apuntando todo, porque esta selección está hecha para que disfrutes, pruebes cosas nuevas y te dejes sorprender. Bienvenido a nuestra gastro agenda semanal 27. ¡Te prometemos que cada plan va a dejar huella en tu paladar!
Playing Solo presenta su propuesta de menú estival con una mirada vanguardista
Luis Caballero redefine el verano desde su barra íntima en Playing Solo, en pleno Malasaña. Su nuevo menú degustación aúna tradición japonesa, técnica y producto local en una propuesta que respira frescura y sensibilidad. Desde el hassun inicial con tomate en tres texturas hasta platos como el hamachi en salpicón o las cocochas con caldo udón, cada pase sorprende sin estridencias. El corzo ahumado o el cremoso de chocolate cierran una experiencia donde emoción y estacionalidad van de la mano. Solo ocho comensales por servicio y una filosofía kaiseki que convierte cada visita en un viaje culinario irrepetible.
Cafe Barbieri, cocina ítalio-castiza en un espacio centenario
En pleno Lavapiés, el histórico Café Barbieri renace con una propuesta gastronómica ítalo-castiza que honra sus raíces con aire renovado. Su carta combina tradición italiana y producto de calidad en platos como los Parpadelle al tartufo, el Pesto Pistacchio con guanciale o la Pizza burrata e mortadela. Todo ello en un ambiente animado, ideal para alargar la noche con cócteles de autor como el Picasso Mule o el Daiquiri Agustín Lara. Un plan perfecto para saborear el verano madrileño en un espacio centenario que sigue escribiendo historia a golpe de buen gusto y un guiño al sur de Europa.
Mercado de San Leopoldo, el lugar perfecto para escapar de las altas temperaturas
Cuando el calor aprieta, el Mercado de San Leopoldo se convierte en un oasis gastronómico con aire acondicionado, sabor internacional y ambiente moderno. Situado en San Leopoldo 8, muy cerca de Plaza de Castilla, este espacio ha reinventado una antigua galería en un mercado con 12 propuestas irresistibles: de la mítica tortilla de Casa Dani al ramen de Ramen Wok o los tacos al pastor de Trompo. Todo con sistema de pedido digital y opción de combinar platos en una sola comanda. Ideal para vermuts, comidas o cenas con amigos sin salir del norte madrileño.
Villa Verbena, un brunch castizo en el entorno de la casa de Campo
Las mañanas de fin de semana tienen nuevo plan en Madrid: el brunch de Villa Verbena. Ubicado junto al lago de la Casa de Campo, este rincón al aire libre combina tradición y sabor con una propuesta castiza ideada para disfrutar del buen tiempo. Por 19 €, el brunch incluye un plato dulce y uno salado —como la tosta de cecina, el huevo benedictine o la torrija de Triciclo—, café y zumo natural. Y si se desea, por 5 € más, se suma un cóctel clásico. Perfecto para arrancar el día con calma, buen gusto y una vista inmejorable.
Asgaya y sus 100 metros de terraza para rendirse a la cocina asturiana
Asgaya estrena temporada con una propuesta estival que reafirma su papel como templo de la cocina asturiana en la capital. Su terraza de 100 m², perfecta para sobremesas interminables, acoge una carta ligera donde mandan el producto y la tradición. Platos como la burrata atomatada, el tartar de atún con helado de wasabi o las verdinas a la marinera conviven con clásicos imprescindibles como su cachopo o la fabada aligerada. Todo ello acompañado de una cuidada selección de vinos y sidras naturales asturianas. Cocina sin artificios, en un espacio ideal para rendirse al norte sin salir de Madrid.
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